Lerici en el Golfo de los Poetas y Pisa en un día

Día 5 : Visitar Lerici en el Golfo de los Poetas y Pisa en un día

Lunes, 24 de junio del 2014

Nos levantamos a las 7 de la mañana en nuestro hotel de La Spezia, el La Spezia Inn, y pasadas las 8 y después de dejar las maletas en el hotel, salimos a desayunar al bar del que nos dieron un vale, en la plaza Garibaldi. Hoy tenemos un día de lo más completo, ya que queremos visitar Lerici en el Golfo de los Poetas antes de irnos a Pisa, desde donde tenemos nuestro vuelo a Girona a las 20.55 de la tarde.
El planning del día es ir ahora por la mañana a visitar Lerici en el Golfo de los Poetas y a mediodía volver a por las maletas al hotel de La Spezia, para irnos hacia Pisa, donde estuvimos hace 6 años, pero nos haría ilusión volver a la Torre de Pisa, así que porque no hacerlo hoy?

Y con estas después de un buen desayuno en el nos vamos hasta la Estación de Trenes de La Spezia, desde donde, justo delante, salen los autobuses de La Spezia a Lerici con una frecuencia es cada 15 minutos más o menos.
En la parada de la estación no están los horarios de este trayecto de La Spezia a Lerici, así que vamos a la Oficina de Turismo y nos dicen que la parada no es la que pensábamos, di no una que está justo en la calle paralela a la entrada de la estación, bajando las escaleras a la izquierda.

También nos confirma que tenemos que coger el autobús con la letra S o L.
La chica nos dice que podemos comprar los tickets en la misma oficina y para evitar que nos pase lo de ayer con los mensajes en el autobús italiano, compramos los tickets ida y vuelta por 2,5 euros el trayecto.

Y así a las 9.45 de la mañana cogemos nuestro autobús de La Spezia a Lerici que nos dejará en este bonito pueblo en unos 30 minutos.
Llegamos a Lerici en el Golfo de los Poetas y nada más poner un pie ya vemos que se mantiene ese ambiente bohemio de esta zona de Italia.

Como ha pasado en el resto de este viaje a Cinque Terre no hay prácticamente visitas imprescindibles en los pueblos y la mejor forma de conocerlos es perdiéndonos por sus calles, esperando que los más increíbles rincones salgan a recibirnos.

En este paseo llegamos hasta el Castilllo de Lerici, desde donde tenemos unas impresionantes vistas del Golfo de los Poetas con Portovenere, donde estuvimos ayer, al fondo.

Son casi las 11.30 de la mañana y la calor empieza a apretar, así que empezamos a bajar hacia el centro de Lerici en el Golfo de los Poetas, perdiéndonos de nuevo por unas calles que parecen sacadas de un cuadro.

En la zona más céntrica del pueblo, hacemos una breve parada para tomar algo y refrescarnos. Lo que si hemos notado es que sentarnos en la zona más céntrica tiene su precio y nos cuesta 6.50 euros por cerveza y coca cola. Más caro que en cualquiera de los pueblos de Cinque Terre en los que hemos estado estos días.

Poco antes de las 12 de la mañana y viendo que el tiempo se nos empieza a echar encima, volvemos a las calles de Lerici, esta vez para dar una vuelta por su paseo marítimo disfrutando del aire fresco.

A las 12.30 de la mañana volvemos a la parada de autobús de Lerici en la Plaza Garibaldi y cogemos el autobús de vuelta a la Spezia donde lo primero que hacemos es ir a recoger las maletas al hotel para ir a comer antes de coger el tren de La Spezia a Pisa.

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Paramos en la pizzería Gira del Pomo, que está muy recomendada en el Tripadvisor y tiene unos precios bastante ajustados.
Pedimos el menú del día por 13 euros y nos ponemos morados. Ensalada di farro, pene al salmón, calamares rellenos…

Aunque la verdad es que el precio es algo caro para las cantidades y por el ambiente nos hace pensar que a lo turistas nos cobran algo más que a los locales 😉
Después de un café rápido consultamos los horarios de los trenes a Pisa y vemos que a las 14.14 tenemos un tren de La Spezia a Pisa que nos llevará hasta la Estación Central en 1.15h más o menos.
Así que no nos queda más que pagar y echar una carrerilla hasta la estación donde llegamos con el tiempo justo de montarnos en el tren.

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Aquí haremos un inciso y es para recordar que siempre tenéis que validar los tickets de tren en las máquinas que hay en las estaciones o en las vías. Si no lo hacéis y pasa el revisor, tendréis una multa de 40 euros por persona.
A nosotros por llegar tarde y olvidarnos de validar este trayecto, el revisor nos cobra 5 euros como multa por ser «españoles», recordándonos que nos hace una rebaja.

Llegamos a Pisa a las 15.30 de la tarde y lo primero que hacemos es ir a buscar las taquillas para dejar las maletas. Pagamos 4 euros por maleta por un periodo de 4 horas.
Y una vez guardadas nos vamos directos a la Torre de Pisa, que está a 1.8 km de la Estación Central.
Mientras vamos recorriendo las calles, nos vienen a la memoria los recuerdos de hace ya 6 años, cuando vinimos haciendo una escapada a Florencia y Pisa. Aunque no recordamos exactamente las calles, sí que hay rincones o lugares que mantenemos en nuestra memoria intactos, como es la zona del río.

Y como nos pasó la vez anterior, de repente, ahí está, frente a nosotros.

Nada más llegar empezamos a ver que aquí se ha acabado la tranquilidad que hemos tenido estos días atrás en Cinque Terre, así que intentamos hacernos un hueco entre la gente que hace las típicas fotos aguantando la torre inclinada, buscando esa perspectiva que aún tenemos en nuestra memoria de hace 6 años.

Y cuando son las 5 de la tarde suena un mensaje en el teléfono. No me lo puedo creer. El mensaje es de Ryanair y dice que nuestro vuelo de hoy a las 20.55 de la tarde, está cancelado.
Con cara de no creérnoslo, lo primero que hacemos es buscar un bar con wifi y revisar el email, confirmando que es correcta la cancelación que nos han enviado por mensaje.
Miramos las noticias y vemos que por la huelga de controladores aéreos en Francia varios vuelos más han sido cancelados.
Hacemos varios plannings alternativos en unos minutos y decidimos hacer algunas fotos más de la Torre de Pisa y ir hacia el aeropuerto a ver que podemos solucionar.
Ahora tampoco arreglamos nada por correr, así que intentamos tomarnos las cosas con tranquilidad, dentro de lo que supone una cancelación.

Después de este pequeño homenaje en la Torre de Pisa y con un medio mal sabor de boca, volvemos a la estación, cogemos el autobús PisaMover, que te lleva desde la estación al aeropuerto por 2 euros por persona y después de hacer cola en la taquilla de tickets del aeropuerto, nos dan la opción de volar dentro de dos días, es decir el 26 de Junio o volar a Roma mañana a primera hora y por la noche a Girona.
Valoramos las opciones y nos quedamos con la primera, ya que la segunda no nos ofrece ninguna seguridad, ya que también pueden anular el vuelo desde Roma (como supimos después que pasó), aunque rechazamos la noche de albergue gratis, ya que nos dicen que a parte de cubrir sólo una noche, aunque nos obliguen a quedarnos dos, el albergue que nos dan, no se confirmará hasta mínimo las 9 de la noche y ahora son las 6 de la tarde…
No queremos alargarnos, así que volvemos a coger el autobús, recogemos las maletas en la estación y reservamos una habitación en el Hotel Milano, al lado de la estación donde aprovechamos la conexión a internet para buscar plannings alternativos para estos dos días extra que nos han regalado.
Como curiosidad tenemos que decir, que sin saberlo, hemos ido a reservar habitación justo al hotel de enfrente al que fuimos hace 6 años.
Aún sin tener claro lo que haremos estos próximos dos días salimos a cenar pasadas las 9 de la noche a la Pizzería da Filippo, al lado de la estación, un local con muy buenos comentarios y que podemos confirmar que son todos cierto.
Pedimos un par de pizzas y agua por 23 euros.

Y aún sin saber donde iremos los próximos dos días volvemos al hotel a descansar después de una tarde más que completa y estresante.
Mañana será otro día, mientras toca soñar con Italia, donde seguiremos dos días más…